IRANEKO OGIAK / PANES DE IRÁN
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Ya os comenté, en mi entrada sobre Irán, la importancia que tiene el pan. En Irán se pueden encontrar cuatro tipos de pan: lavash, barbari, sangak y taftun. Todos los panes son hechos con harina de trigo, y el sangak es el único hecho con harina integral. Además, al igual que en muchos otros países que le rodean, en Irán el pan es plano, puesto que no se utiliza levadura.
El lavash es el pan con el que se desayuna. Es un pan finísimo y muy largo, que si se come fresco es delicioso, pero que tras pocos minutos se convierte en chicle. En las grandes ciudades este pan se puede encontrar industrializado, pero realmente no vale nada.
Afortunadamente, en un pequeño pueblo encontramos una señora que lo hacía de forma tradicional, y tuvimos la suerte de poder probar el auténtico lavash.
El sangak es el pan más tradicional, el que se come durante todo el día. Es más gordo que una tortilla mexicana, y lo hacen en hornos de leña. Lo más común es utilizar el calor de las paredes del horno, por lo tanto, lanzan en pan contra la pared para que la propia piedra haga de chapa. Además a la superficie añaden sésamo y hierbas como cilantro.
Barbari fue el pan que más me gustó con diferencia, sin duda un deleíte para los sentidos. Sigue siendo un pan plano, pero tiene un poc de miga en su interior, además es muy aromático gracias al sésamo y especias que le añaden. Afortunadamete, pudimos disfrutar de deliciosos bocadillos de panir (queso) y barbari.
Por último, el pan más difícil de encontrar fue el taftun. Un pan parecido al sangak, pero hecho en una base de piedras. Es decir, el horno está lleno de piedras pequeñas donde se coloca el pan y ellas hacen la función de brasa, y a la vez forman agujeros. A este pan no le añaden ningún tipo de hierba ni sésamo, por lo tanto no es tan rico como el sangak.
Gracias a nuestra inquietud por saber sobre los panes iranís tuvimos la suerte de conocer muchísima gente con la que compartimos, pan (siempre regalado), té y una buena charla